Saragó es la apuesta para recuperar el honor
El joven técnico caraqueño será el encargado de que los ‘Rojos del Ávila’ puedan reverdecer viejos laureles
Ansiedad. Si le preguntan a cualquier aficionado del Caracas FC, les dirá que este es el sentimiento generalizado en la parroquia avileña. Tres años sin levantar un trofeo para el equipo más ganador del país es mucho, y murmullos de inconformidad e impaciencia comienzan a recorrer el ambiente.
Tras la salida del discutido Ceferino Bencomo por “diferencias en la planificación de la próxima temporada”, la junta directiva del Caracas FC ha decidido apostar por Eduardo Saragó, un entrenador ganador – sus temporadas con el Deportivo Petare y el Deportivo Lara le avalan – y con pasado como jugador en la institución de la Cota 905.
Saragó y su equipo técnico tendrán que enfrentar dos grandes retos en la temporada que está por comenzar: trabajar bajo un presupuesto limitado y aspirar a ganar títulos con una plantilla que, en el papel, luce inferior a otras más consolidadas. Los fichajes rutilantes y el desembolso de grandes cantidades de dinero han quedado atrás. La junta directiva ha dado un viraje al timón, y sostener al equipo económicamente se ha convertido en su principal premisa. Para ello han desarrollado una estrategia muy simple: invertir gran parte del presupuesto en las categorías inferiores, desarrollar jugadores y luego venderlos a equipos extranjeros.
Rómulo Otero, uno de los jugadores más prometedores del panorama nacional, estuvo a punto de marcharse este verano a Gremio de Porto Alegre. Antes que él, la afición ya tuvo que despedirse de Fernando Aristeguieta, quien emigró a Francia con apenas 20 años de edad. Y así como Ceferino Bencomo se marchó a finales de mayo, poco a poco lo ha hecho un grueso de la plantilla. Jesús Meza, Juan Guerra, Édgar Jiménez, Ángelo Peña y Renny Vega – sólo por citar algunos nombres – han buscado nuevos destinos y ya no forman parte del equipo.
Para paliar estas ausencias, los ‘rojos del Ávila’ se han reforzado con jugadores como Ricardo Andreutti, César ‘Mágico’ González, y hombres de confianza, además de viejos conocidos de Eduardo Saragó, como Bladimir Morales y Rafael Lobo, a quienes ya tuvo la oportunidad de dirigir en el Deportivo Lara. El uruguayo Javier Guarino, ex goleador del Real Esppor, junto con Roberto Armúa y el defensa argentino Roberto Tucker aportan la cuota extranjera. Sumados a estos refuerzos, los jugadores juveniles – como siempre – desempeñarán un papel importante. Saragó lo explicaba en una entrevista a El Universal: “El trabajo de categorías menores en el Caracas te da la oportunidad de tener muchas herramientas. Es la primera vez que estoy en un club donde cuento con más de dos opciones para poder jugar con la regla de juvenil, y son opciones buenas”.
La expectación es máxima. Tres años sin ganar un título parece eterno para una afición que está acostumbrada a conquistar trofeos y jugar bien en el proceso. Todos se encomiendan a Saragó, ese entrenador joven y ganador que regresa a casa para devolver al Caracas FC al primer lugar.