¿Tenía La Vinotinto nivel para jugar en Brasil 2014?
Luego del gran nivel de fútbol mostrado en el mundial, surge la pregunta de si la vinotinto podía haber alcanzado dicho nivel
Fue evidente la frustración de los venezolanos con la no clasificación de la selección a Brasil 2014. Un amplio grupo de fanáticos, periodistas y analistas solicitaron la renuncia de quien fuese el técnico en el pasado ciclo eliminatorio, César Farías; a su defensa, algunos argumentaron que las expectativas eran desmedidas.
¿Realmente lo eran?
Está claro que el hincha común generalmente espera más del fútbol venezolano y de la selección de lo que ambos pueden dar si nos atenemos a la realidad futbolística del país. Y antes de que salten los empedernidos optimistas a balbucear eso de “No hay que centrase en lo negativo”, quiero extenderles mi abrazo, darles la razón y al mismo tiempo recordarles que a la luna no se llega saltando, soñando o teniendo fe: hace falta la tecnología correcta y la preparación adecuada.
Sin embargo, el grupo que dirigió Farías era quizá la mejor selección venezolana de todos los tiempos, la cual desperdició una oportunidad muy valiosa en una Eliminatoria que no contó con Brasil. A Farías, en los deportivo, le criticaron dos cosas principalmente: 1) de forma objetiva y clara, el no cumplir con el objetivo trazado desde el principio, clasificar al Mundial. 2) No aprovechar al máximo las capacidades de los jugadores.
Lo segundo es lo que en lo personal he argumentado muchas veces, pues el modelo de juego se estancó luego de la Copa América 2011; y el empecinamiento con querer imponer un estilo impropio de los jugadores de los que se disponía, aunado a la cantidad de resultados que se pretendió “gestionar”, limitaron las aspiraciones venezolanas.
Pero ¿de haber hecho las cosas de la forma en que se le reclama hubiese sido diferente?
Eso jamás lo sabremos. Los hubiese no existen. Y en el análisis lo más importante es que al margen de las capacidades del rival, las cosas pudieron hacerse mejor; y si no se clasificaba, al menos se pudo estar más cerca.
Pero hay más. En la última Copa América –clímax de la selección de César–, Venezuela clasificó a cuartos como segunda de grupo empatada en puntos con Brasil, tras empatar con este en el partido inaugural, vencer 1-0 a Ecuador y empatar a tres con Paraguay. Luego se eliminaría a Chile 2-1 y se perdería en semifinales contra Paraguay; para a la postre perder el partido por el tercer lugar frente a Perú, 4-1.
Luego, en la Eliminatoria se cosecharían dos victorias llamativas por 1-0: frente a Argentina y Colombia; la primera, candidata a alzar la Copa del Mundo; la segunda, galante de un buen juego.
Eliminatoria
Que la nuestra es la Eliminatoria más dura, no es un secreto. De hecho, si se observan a los cinco clasificados al Mundial nos encontramos con que todos tienen al menos un jugador en un equipo top de Europa, cosa que no tiene Venezuela; y si bien se puede hablar de la jerarquía de Rondón y Arango, ninguno conoce lo que es la máxima exigencia en un club obligado a ganar hasta los partidos de entrenamiento. Ahora bien, el proceso premundialista uruguayo no fue el más optimo, de hecho bien se le pudieron (Y debieron) haber sacado los 6 puntos; esto desde una óptica cualitativa y analizando los momentos en los que se enfrentaron ambas selecciones así como el desarrollo de ambos partidos. Seis puntos que hubiesen (Me perdonan la palabra) puesto a Venezuela en el quinto lugar y a Uruguay fuera del Mundial. ¿La diferencia?, la experiencia pesa y por momentos en ambos partidos la Vinotinto actuó como un equipo chico: en la ida al conformarse con el empate y en la vuelta al no tener herramientas suficientes para desarrollar un buen ataque posicional.
¿Qué significa esto? Venezuela no está al nivel de ninguno de los equipos sudamericanos clasificados a Brasil 2014, el lugar ocupado en la tabla refleja la realidad; sin embargo, sí tuvo a su disposición las posibilidades (Porque el fútbol es así) para clasificar al repechaje. Pudo y quizá allí debió estar.
Mundial
Me salto el repechaje pues la Vinotinto es mucho más que Jordania. No hay mucho que analizar ahí. Entonces, visto el gran nivel de juego que se ha mostrado durante el Mundial (Más alto que en los dos anteriores), ¿podría haber alcanzado nuestra selección un nivel más o menos acorde al promedio?
En la previa es muy difícil, primero teniendo en cuenta el bajo nivel de la liga local y los varios jugadores de selección que hacen vida allí; segundo, los jugadores que están en el extranjero no juegan en equipos top y muy pocos se encuentran peleando títulos año tras año. En contraposición están los resultados obtenidos durante y después de la Copa América:
- El Brasil frente al que se empató en la primera jornada de la CA11 está muy por debajo del actual Brasil. Incluso, el técnico en ese entonces era Mano Meneses cuyo carácter al momento de gestionar la plantilla parecía ser menos fuerte que el de Luiz Felipe Scolari, quien además demuestra más pericia en el cargo.
- En cuartos de final se elimina al Chile de Claudio Borghi, un equipo que estaría marcado por temas indisciplinaros. Más allá de eso, el marcador fue un engaño: La Roja fue muy superior, estuvo muy cerca de empatar y darle la vuelta al partido. Ese día la Vinotinto ganó con más fortuna que fútbol.
- En semifinales se pierde contra Paraguay mediante los penales, en uno de los partidos de más bajo nivel de todo el torneo. En esa competición no se le pudo ganar a los paraguayos, quienes al margen de llegar a la final, lo hicieron sin ganar en los noventa minutos un solo partido y con un bajo nivel, el cual habla muy mal de la calidad de juego de esa Copa.
- La victoria frente a Argentina en la Eliminatoria se logró frente a una Albiceleste recién tratando de entender las nuevas ideas del, para ese entonces, nuevo D.t, Alejandro Sabella. Además, la Vinotinto arrastraba un nivel de forma alto, totalmente disímil al de Argentina. La realidad futbolística de ambas selecciones quedó palpada de forma más coherente en el último partido efectuado entre ambas, con victoria 3-0 para la Albiceleste.
Dicho esto, y ya con ánimos de responder la pregunta del título, a mi humilde entender la respuesta es no, nuestra selección no tenía, y difícilmente alcanzaría, un nivel acorde al mostrado en el Mundial. Claro está, quizá la Vinotinto tenga más nivel que algunas selecciones que clasificaron a la Copa del Mundo, pero que no pertenecen a la CONMEBOL; las mismas han sido la excepción al alto nivel de juego desplegado.
También quedará la duda de cómo se pudiera haber preparado el equipo de Farías en caso de un hipotética clasificación, dado que se debe mencionar que el rendimiento alcanzado luego de la preparación para la Copa América resultó muy disímil, en positivo, en relación al mostrado antes. Aunque más allá de una gran preparación, o pese a la misma, considero que hubiese sido muy complicado alcanzar el nivel de la media de los equipos clasificados. Hay que seguir trabajando.