¿Se puede incluir la Tricolor en la Vinotinto?

Todos hemos querido alguna vez que la Selección Nacional se vista con el tricolor nacional, capaz y no como lo hace Colombia/Ecuador (camisa amarilla, short azul y medias rojas), pero tampoco pareciendo una guacamaya en el intento.

Antes que nada, hay que destacar que para ser miembro oficial de la FIFA se tienen que cumplir ciertos requisitos, algunos tan obvios como tener bandera (sí, es un requisito real), otros como asignar un sobrenombre oficial, colores oficiales en formato Pantone (es una empresa dedicada a la clasificación y estandarización de los colores), escudo y otras cosas más técnicas como delegados y Comité Ejecutivo. En nuestro caso, el sobrenombre sería La Vinotinto (¿sorprendido?), color "Burgundy" (lo que sería algo así como granate, en español), y otras cosas como el escudo que ya todos conocemos. Toda esa información se puede conseguir en el perfil de Venezuela en la página de la FIFA.

Ahora, ¿qué tiene que ver todo esto con el título del artículo? Bueno, en el capítulo 5, apartado 2, del reglamento citado, nos dice:

"Con excepción de los casos donde expresamente se determine algo diferente en el presente reglamento, ninguna pieza del equipamiento de juego que vista un jugador o guardameta podrá combinar más de cuatro colores. Los colores que se utilicen en la identificación de las asociaciones miembro, del fabricante y/o en otras marcas o insignias no se considerarán como colores de equipamiento de juego"

Entonces, ¿es un rotundo sí? Por ejemplo, si Adidas (en este caso, ya que viste a la Vinotinto desde el 2004) quisiera hacer un modelo Vinotinto con el tricolor, podría hacerlo si en el uniforme no se le agregan las estrellas. Ya que el blanco de las mismas sumaría un quinto color DENTRO del uniforme. Entonces, Adidas estaría en una gran disyuntiva entre hacer un uniforme sin estrellas (lo que seguramente molestaría a muchos) o mantener el uniforme tal como está. Una alternativa sería hacer una camisa sin el vinotinto y usar los cuatro colores de la bandera. Todos felices, ¿no?

Seguramente has visto este uniforme en tiendas. Ha tenido bastante aceptación, y aunque seguramente sepas que es falsa, si quisieran hacerla comercial, no sería posible.

Otra limitación sería el fabricante. En la actualidad los fabricantes de uniformes usan varias plantillas únicas para todas las selecciones -y clubes- que visten, simplemente le cambian el color y en algunos casos le agregan algunos detalles decorativos. Para hacer un uniforme con cuatro colores habría que crear una plantilla especial. Algo extremadamente difícil en fabricantes grandes como Adidas y/o Nike.

Hay muchas más limitaciones al momento de crear un uniforme, como tamaños específicos para los números, dorsales, espacio libre en las mangas, tamaño específico para los escudos de las selecciones y muchas otras regulaciones que seguramente son un dolor de cabeza creativo para los diseñadores. Aunque estas regulaciones se establecen para que evitar aberraciones como estas:

A pesar de todo, hay que agradecer a la FIFA que hiciera unas reglas para evitar estos accidentes graves al buen gusto.

Un caso curioso fue el uniforme en honor al bicentenario de Venezuela, que trajo un escudo en la parte posterior, justo por debajo del cuello. Este adorno es considerado político y la FIFA prohíbe tener detalles de índole religioso o político en los uniformes. En el 2011 las camisas al público salieron con el mencionado adorno, pero los uniformes de juego no. Igual le pasó a Argentina ese mismo año.

Seguramente has visto esta chaqueta. Pero el reglamento de los cuatro colores aplica sólo en los uniformes de campo y no en los demás artículos fuera del mismo. Además, si ves bien la chaqueta notarás que cumple perfectamente con la regla de los cuatro colores.

Hay que recordar que estas reglas aplican también para los clubes, y con la excepción del patrocinante (la FIFA prohíbe el uso de patrocinantes en las selecciones nacionales) toda la normativa es la misma y se aplica de igual manera; de hecho, la FIFA exhorta a las federaciones de aplicar el reglamento para el torneo interno de cada país.