Deportivo Petare vs. las probabilidades de descenso
Análisis del Deportivo Petare y de su proyecto social de cara al Torneo Clausura
Si googlean "barrios más violentos del mundo", el 90% (A riesgo de quedarme corto) de las listas que consigan incluirán a la parroquia de Petare. Por eso, cuando en el 2010 se oficializó el cambio de nombre de Deportivo Italia a Deportivo Petare, no faltó quien hiciera gala de la pobreza mental que caracteriza a nuestra sociedad (Misma la cual hace que, por ejemplo, se burlen de una miss por ser calva y de tez oscura), para hacer bromas que relacionaran a los jugadores de la institución con el hampa común.
Nada más lejos de la realidad.
Mientras en instituciones como Mineros de Guayana y Deportivo Táchira se malgasta el dinero de las gobernaciones locales, pagándole sueldos que parecen de mentira a los jugadores, y comprando a los más costosos del mercado, un equipo con uno de los presupuestos más cortos de la Primera División de Venezuela se propuso la tarea de sembrar un proyecto social que beneficiara a los niños y a la comunidad en general.
Para esto, también se buscó el apoyo de la Alcaldía de Sucre. El cual, de cierta forma, se consiguió: según la guía de medios entregada a principios de temporada, se han construido más de 40 canchas deportivas, las cuales están beneficiando a más de 2.000 niños. También conviene agregar que, a diferencia del 2010, en la actualidad, la institución cuenta con categorías sub 20, sub 18, sub 16, sub 14, sub 12, sub 10 y femenino.
Los tintes rosas que adquiere el proyecto bien podrían enternecer a cualquiera que lo ojeara por encima. Y la cosa tomó aires titánicos cuando, en la presentación de la temporada 2014/15, el alcalde Carlos Oscariz declaró que el objetivo era que, a partir de la siguiente temporada, el Deportivo Petare jugara en su primer equipo solo con jugadores formados en la cantera de la institución.
Más que una osadía, tal afirmación pareció una locura que nadie se atrevió a cuestionar públicamente en medio de la rueda de prensa. ¿Cuántos equipos en el mundo presumen de jugar con puros canteranos? Pongo un ejemplo: la Masía, centro de formación del Barcelona F.c (España), es famosa por la cantidad de jugadores que ha dotado a un equipo acostumbrado al éxito deportivo. De hecho, tocó su cima en el 2011, cuando tres jugadores formados en dicha cantera –Iniesta, Xavi y Messi– fueron condecorados por la FIFA como los tres mejores jugadores del mundo. Aun así, sería muy difícil que el Barcelona compitiera de la forma en que lo exige su entorno sino fichara jugadores ya hechos.
El jugador profesional se forma con horas de trabajo. Tener un equipo de puros canteros implicaría malograr el proceso formativo al apurar el ascenso al primer equipo de los jugadores, como también implicaría tener un buen poder adquisitivo para poder retenerlos una vez estén consolidados.
Aquellas palabras de Oscariz pudieron ser solo un exceso, producto de alguien que se sabe mover en la política y no en el fútbol; sin embargo, las mismas –teniendo presente la gran labor social que está realizando el Petare– me hicieron surgir una interrogante: ¿qué pasa si el equipo desciende?
Modelo de juego
El equipo de John Giraldo, durante el Apertura, realizó diferentes variantes al modelo de juego en función al rival; sin embargo, hubo características que se mantuvieron: el uso de centrales que sean buenos lanzadores pero que también sepan jugar en corto; de volantes de primera línea que puedan buscar la pelota en zona 1 para darle salida al equipo, como también sean intensos al momentos de recuperar; de volantes de segunda línea, como medio para desequilibrar en las bandas y trazar diagonales con balones controlados; y de un delantero que se encargue de fijar a la defensa rival, y de rematar centros.
En el Apertura, si bien se lograron momentos de buen fútbol, muchas veces el equipo se vio superado debido a que 1) el rival tenía jugadores de mayor nivel. O 2) gracias a la dependencia excesiva hacia un grupo de jugadores a quienes costaba mucho suplir –en caso de lesión, suspensión o bajón en el rendimiento–, y que, paradójicamente, en su mayoría, ya no están en el equipo.
Bajas para el Clausura:
- Jhon Palacios (Defensa central/13 partido en el Apertura, 1089 minutos en cancha, 13 partidos de titular, un gol, tres tarjetas amarillas, una roja): 31 años, fichado por Metropolitanos. Era el capitán y líder indiscutible del equipo. Sus condiciones psicológicas representaban una virtud y un defecto por igual: siendo algo volátil, le era muy fácil perder el control o encararse con compañeros o con rivales; eso sí, transmitía mucho ánimo y agresividad –en el sentido positivo de la palabra– mediante su carácter competitivo. Un líder. Como central, es correcto. Su mejor faceta se ve en el juego aéreo y en la defensa posicional: es bueno en el uno vs. uno defensivo, marca bien en zona, intercepta bien –aunque su anticipación no es muy buena– y tiene un excelente despeje; además, es rápido en carreras largas y ágil al momento de reaccionar. Tiene un pase largo correcto, en corto juega la más fácil –que no es necesariamente la mejor opción–, y tiene valor para lucir una buena conducción que le permite atraer rivales al momento de salir jugando.
- David Centeno (Volante de primera línea o lateral derecho/16 partidos en el Apertura, 1404 minutos en cancha, 16 partidos de titular, un gol, tres tarjetas amarillas): 22 años, fichado por Metropolitanos. Su posición natural es la de volante de primera línea; sin embargo, ahí, si bien es útil en la defensa posicional y en las transiciones defensivas –debido a unas capacidades físicas excelentes que le facilitan las recuperaciones de balones–, también queda expuesta su muy limitada técnica con el balón. Como lateral derecho, ofrece un despliegue físico importante. Va al ataque sin temor y no desentona tácticamente. Es capaz de ejecutar un par de centros buenos, lejos de la precisión que se añora en un lateral ofensivo. Si juega en un equipo largo, podrá destacar; si lo hace en un equipo corto, no será el más idóneo para tener el balón en los pies. Un jugador de mucha entrega y pundonor.
- Guillermo Banquez (Volante de segunda línea/15 partidos en el Apertura, 1008 minutos en cancha, 14 partidos de titular, uno de suplente, un gol, tres tarjetas amarrillas): 25 años, fichado por Metropolitanos. Era uno de los más desequilibrantes del Petare. Tiene un buen drible y finta. Puede jugar por dentro o por fuera, sin que esto suponga una disminución de sus posibilidades. Con espacio es peligroso en carrera; sin espacio, podrá encontrar profundidad mediante certeros pases. Físicamente, a veces, pareciera que le cuestan los rivales más intensos. A veces, es algo intermitente.
- Darwin Gómez (Delantero/16 partidos en el Apertura, 1192 minutos en cancha, 14 partidos de titular, 2 de suplente, dos goles, 4 tarjetas amarillas): 23 años, fichado por el Deportivo Lara. Puede ser un delantero profundo, como también resulta útil al momento de fijar la defensa rival. Técnicamente es correcto. Se desmarca muy bien. Es un jugador de mucha entrega, incisivo, incómodo porque va a todas las pelotas, muy útil en la presión. De esos tipos que fastidian hasta el cansancio a la defensa rival.
- Francisco Aristiguieta (Mediocentro/14 partidos en el Apertura, 1229 minutos en cancha, 14 partidos de titular, 4 tarjetas amarillas): 26 años, fichado por Metropolitanos. Era, quizá, el jugador más talentoso de la plantilla. Un mediocentro con la capacidad de jugar en un equipo de mitad de tabla para arriba. Técnicamente impecable en todas sus ejecuciones. Dinámico e intenso con y sin balón, y en todas las facetas del juego. Destaca su comprensión táctica y claridad para jugar la pelota. No es muy docto en las recuperaciones, pero compensa su deficiencia en técnica defensiva con su inteligencia para saber ubicarse y con su intensidad. Eso sí, su posición es esa: mediocentro. Giraldo trató, en algún momento, de adelantarlo unos metros, lo que evidenció las carencias de Francisco para jugar como enganche o interior: no tiene un giro lo suficientemente rápido, ni una técnica muy depurada para sostener el balón de espaldas al arco, y también le falta drible. Como mediocentro puede ser de los más destacados del torneo local.
Estos cinco jugadores fueron los más sobresalientes del Petare en el Apertura. Las otras dos bajas, por ende, no deberían pesar tanto. Estas son Eduardo Lima (Portero/10 partidos en el Apertura, 900 minutos en cancha, 10 partidos de titular, 2 tarjetas amarillas. 22 años, fichado por Mineros) y José Torres (Volante de segunda línea/11 partidos, 896 minutos en cancha, 11 partidos de titular. 21 años, fichado por Llaneros).
De hecho, Eduardo Lima terminó el Apertura siendo el suplente de Giancarlos Schiavone, un portero de 21 años, que desde su debut en el primer equipo ha venido realizando partidos importantes: destacando su elasticidad, buena colocación, capacidad para atenazar balones y llegar a disparos que parecen imposibles; mientras que por otro lado, muestra un juego de pies y un saque largo deficiente. Este Torneo Clausura debería ser el de su consolidación en el fútbol profesional.
Deportivo Petare vs. las probabilidades de descenso
Aparte de Schiavone (7 partidos de titular, 590 minutos en cancha), permanecieron en el equipo otros cuatro jugadores importantes: Leonardo Bautista (13 partidos, 1121 minutos), Josep Sosa (15 partidos, 1300 minutos), Alejandro Valldeperas (10 partidos, 776 minutos) y Rafael Arace (14 partidos, 1001 minutos). Ellos, salvo Valldepera y Schiavone, son los únicos jugadores en la plantilla que, en lo que va de temporada, han superado los 1000 minutos en Primera División. Situación estadística que no se compensa con las altas anunciadas hasta ahora por la institución:
- Juan Carlos Castellanos (Volante de primera línea o interior/1 partido jugado en el Apertura, 90 minutos en cancha): 19 años, procede del Caracas F.c
- Wildiyonh Vivas (Volante de primera línea/4 partidos jugados en el Apertura, 169 minutos en cancha, 2 partidos de titular, 2 partidos de suplente): 21 años, procede del Caracas F.c.
- Gabriel Benítez (lateral izquierdo/1 partido jugado en el Apertura, 90 minutos en cancha, 1 partido como titular): 21 años, procede de Portuguesa.
- Carlos Pineda (Volante de segunda línea o delantero): procese del Estrella Roja.
- Francesco Arévalo (Delantero): procede del Atlético El Vigía.
Si bien he visto muy poco a los fichajes realizados, preocupa el poco ritmo de juego con el que vienen Castellano, Vivas y Benítez, así como la ausencia de minutos en Primera –en esta temporada– de Pineda y Arévalo.
Económicamente, la institución atraviesa una situación precaria; y más allá de que los jugadores y el cuerpo técnico logren desarrollar un buen modelo de juego, resulta notable la diferencia de calidad entre esta plantilla y la del resto de los equipos del torneo. A lo que además hay que sumar que el único jugador maduro de la plantilla es Leo Bautista, siendo los demás muy jóvenes y aún en etapa formativa.
El cineasta español Fernando Trueba declaró una vez que “los jóvenes están sobrevalorados”. Una frase interesante, que seguro esconde mucho de razón, al menos desde cierto desprecio social que se instala a veces hacia aquellos que pasan de 40 años –que son en realidad la generación pudiente y en plena capacidad inversora de cualquier país–. Pero el Deportivo Petare no puede creer en eso. No. Primero, porque honra una comunidad en la que, más bien, los jóvenes han sido infravalorados, maltratados e ignorados. Segundo, porque con una plantilla joven, pero hambrienta, pretende escupirle en la cara a todos los que le pronostican un posible descenso.
Pase lo que pase, la institución, los inversores, y la Alcaldía de Sucre, deben recordar que allí, en Petare, se ha hecho todo lo contrario a sobrevalorar los jóvenes. El objetivo (Utópico para una realidad deportiva/competitiva) no creo que debería ser jugar a nivel profesional con puros canteranos, sino mostrarles a los jóvenes de la barriada una realidad diferente a la que han estado acostumbrados. La institución puede o no fallar en el fútbol de alta competencia, pero en su rubro social no. Sin importar cómo se encuentre el primer equipo, ese debería ser el norte.